Jonathan Ames afirma que se “debería denunciar por plagio y difamación”. Desde sus inicios ha aireado sus cuitas sexuales en la noche neoyorquina, algo que le ha servido para ganarse el sustento, sí, pero también muchas enemistades. Además, lo ha hecho en todos los formatos posibles. Ex boxeador, crápula, novelista, hombre-espectáculo y cómico de stand-up, entre muchas otras facetas, ha publicado libros autobiográficos como My Less than Secret Life o I Pass like the Night. En España, se ha editado su tebeo El alcohólico (Planeta DeAgostini Comics) y el sello Ático de los Libros lanzará esta primavera Wake up, sir!, cruce imposible entre El Quijote y los pasajes más hilarantes de Wodehouse. Al margen de sus escritos, Ames ha sido colaborador habitual en el reputado show televisivo de David Letterman y es el ideólogo (en realidad, también el protagonista) de Bored to Death, con Jason Schwartzman, Ted Dunson y Zach Galifianakis, serie de la prestigiosa cadena HBO (Los Soprano, The Wire) sobre un escritor bloqueado que, tras leer demasiado a Hammett y Chandler, decide convertirse en detective privado. En la presentación de su última novela, dejó que un tal Throwdini le arrojara cuchillos. Su actuación puede ser imprevisible.
